El año pasado me diagnosticaron trastorno generalizado de ansiedad ya que un buen día, y debido al estrés y nervios que tengo debido a mi personalidad de carácter nervioso, me dió un ataque de pánico en toda regla. Meses antes pasé por periodos de estrés y nerviosismo por diferentes causas externas, en el trabajo y en la familia, aunque ninguna de ellas fue grave. El día del primer ataque cuyo detonante fue que la noche anterior estuve trabajando hasta las 6 horas, me levante a las 09 y no llegué a casa hasta las 13:00 horas; todo ello me produjo que, andando por la calle, se me aceleró el corazón como nunca, acompañado de sensaciones de ahogo, hasta el punto que me tuve que sentar y llamar a una ambulancia, yo creía que pudiera haber sido un ataque al corazón en toda regla. Pero, tras varios ataques y varias idas a los centros hospitalarios, no me detectaron nada físico. Estos ataques eran iguales, a veces acompañados de intensos mareos que se iniciaban desde la nuca (nunca los había tenido) y otras, acompañados de temblores, como si estuviera titiritando de frío. al final decidí comentárselo a mi doctora de cabecera para después ser atendido por un psiquiatra. Entre tanto sufría de mis ataques diarios, con una fuerte sensación de ataque al corazón o muerte inminente. Afortundadamente, la psiquiatra, me entendió perfectamente, cosa que los anteriores médicos no mencionaban por desconocimiento o por protocolo médico. Como decía, la psiquiatra me recetó un antidepresivo y tranquilizantes. Los primeros días me hizo un efecto rebote, provocándome los mismos síntomas que la ansiedad pero, días más tarde, tuvieron una gran efectividad positiva en mi salud. Pasé 6 meses con el tratamiento hasta llegar al fin del mismo. Los primeros días de dejarlo tambíen tuve algunos síntomas pero al tiempo pasaron. No obstante, hoy día ha pasado casi 1 año y se me están repitiendo otra vez, si bien, no con toda la crudeza del principio, pero otra vez los estoy notando; y no estoy nervioso por ningun agente ni causa externo, en este tiempo he aprendido a tranquilizarme un poco y a no sofocarme demasiado pero, aún así se me están repitiendo, aunque no con mucha intensidad. Hago respiraciones profundas y, de momento, los estoy asimilando. No sé si un día de estos me dará otra vez con la agudeza del principio y tendré que ir, de nuevo, a la especialista. En fin, espero que no y que lo pueda superar. Decir que practico mucho deporte, andar, correr, bici, fútbol-7 y gimnasio. La psiquiatra me dijo que si no hubiera practicado ningún deporte que, posiblemente, me hubiese aparecedio la ansiedad con sólo 20 años. De ahí el efecto beneficioso de practicar algo de deporte.
Por ello, te digo que no te desanimes y que sigas adelante y creo que cuanto menos pienses en ello y más te “evadas” de pensar, mejor te irá.
Saludos.