Hola Carmen. Vaya… otro bajón… lo siento.

Mira, te cuento que cuando yo empiezo los tratamientos, estoy fatal un montón de tiempo. Vamos, para tener que darme de baja en el trabajo (náuseas, mareos, más ansiedad, insomnio…). Yo te recomiendo que no te preocupes ni de la semana que viene ni nada de nada. Que el domingo sigues mal, pues te vas para el médico, y te quedas en casa. No sé si peligra tu puesto… eso ya sería peor. Pero mirándolo fríamente, una vez superada mi última crisis de hace año y medio (no quiero ni acordarme), te digo que cuando estamos ansiosos, nosotros mismos tendemos a aumentar la ansiedad con preocupaciones nuevas. Intenta darte cuenta de cuándo estás alimentando preocupaciones, y céntrate en esperar a que el tratamiento te haga efecto. Y si tienes que darte de baja, pues oye, como al que le da la ciática y tiene que guardar reposo. Y punto.

Tú cuídate, déjate de agobios, facilítate todo mucho, y por supuesto, grábate a fuego que pronto vas a estar bien. Siempre salimos, ¿verdad?

Un abrazo muy fuerte, guapa.

anA.