Chapó….no sé que más decir.
Aunque el problema que tienen/tenemos la mayoría de ansiosos, hipocondriacos, depresiivos, obsesivos….es que nuestra cabeza va a su bola y es muy difícil dominar nuestros pensamientos.
Hemos de aprender a enderezar nuestros miedos, a dominarlos, porque yo soy de las que pienso que se puede, aunque nos va a llevar (como todo) mucho tiempo conseguirlo.
Tras superar hace un año un cáncer de mama, ha cambiado…buf…un montón mi manera de ver la vida. Es muy cierto que das prioridad a lo realmente importante y dejas de obsesionarte por chorradas (la mayoría de las veces, no siempre).
Estoy aprendiendo a quererme mucho (es más difícil de lo que parece) y a cuidarme más, no solo físicamente: ahora hago natacion, y pilates ; sino tambien mentalmente: meditación y reiki, y sé lo realmente complicado que es domar la mente, aún estoy en ello pero sigo practicando.
Y todo esto viene al cuento de que si a tu cabeza constantemente le estás enviando mensajes negativos por supuestísimo que tú serás negativo y verás las cosas más negras de lo que son, pero si por el contrario los mensajes que le mandas son positivos, la cosa cambia y la vida se vé más de «color de rosa». Y es tan sencillo (aunque tambien tan complicado) como que, cuando estás pensando algo malo o muy malo, desvies la atención de tu mente cantando alguna canción o pensando en algo que realmente te guste o te relaje…
En la asociación del cáncer, nuestra estupendísima psicóloga, de vez en cuando nos manda «hacer deberes». Uno de los que nos mandó hace poco fué: antes de irnos a dormir teníamos que escribir en una libreta 2 cosas que nos hubieran hecho felices durante el día. El primer día que lo hice, me quedé sentada delante del cuaderno sin saber que poner, había sido un día horrible, de esos que tienes ganas de que termine: había discutido con mi hijo adolescente (que está insoportable), mi marido estaba supermega estresado por el trabajo y se había acostado sin cenar y sin apenas hablar de nada, mi otro hijo había estado también de un humor de perros, se me había estropeado la lavadora y tenía un montón de ropa apilada para lavar…..un asco de día, para que contaros más….y allí estaba yo, con el boli en la mano sin saber que poner, ¿algo positivo del día?, qué ¿que sigo respirando?….vaya mierda.
El caso es que después de darle vueltas al asunto, me dí cuenta de que por la tarde había ido a ver a mis padres y había estado charlando un rato con ellos. Vamos a ver Fina (me dije), tu padre tiene 83 años y tu madre está operada del corazón ¿cuanto te queda de poder disfrutar de ellos? ¿mañana seguirán aquí?… eso había sido una cosa buena del día, ese momento me había hecho felíz y me esaba pasando totalmente desapercibido.
Hay muchísimas cosas que nos hacen felices durante el día y pasamos por delante de ellas mirando a otra parte, tenemos que aprender a abrir los ojos, a mirar mejor la vida. Pero cuesta, ya sé que cuesta, aunque yo, cada día lo sigo intentando. Un abrazo