Hola esponjita, yo cuando caí en la depresión recuerdo que escribía todo lo que se me pasaba por el coco, incluso aunque
te parezca la idea una tontería, a mi me hizo mucho bien, pues no se lo podía contar a nadie, y más por no preocupar a mi familia ( pensamientos de suicidio, de verlo todo negro e incluso de no sentir nada ni querer ver ni hablar con mis hijos).
Estos fueron los peores meses de mi vida, pero ya los superé gracias a la ayuda de la medicación y después de caer en
un pozo sin aparente final, conseguí salir a flote. Todo lo malo se pasa, es cuestión de tiempo y de pedir ayuda, hoy en
día hay medios para aliviar los síntomas y terapias donde acudir, pero lo más importante creo es tus ganas de vivir.
Hay que echarle huevos y tirar para adelante, con los años y yo ya tengo unos cuantos se aprende a valorar más los momentos buenos y las pequeñas cosas y no dar importancia a lo no importante. Ponte las pilas, piensa que eres joven
y tienes mucho por vivir y lo que te haya pasado ya no se puede cambiar, pero de ello puedes aprender para que si te
vuelve a pasar no te afecte tanto. Todos tendemos a engrandecer los problemas y es más fácil pensar en negativo y
quedarse quieto que hacerlo en positivo y ponerse a andar con un par. Dicen que el miedo paraliza, y yo creo que el
miedo no exite, nos lo inventamos cada uno como escusa para no cambiar y justificar nuestros actos .Un abrazo y sé fuerte.
Animo y ya nos cuentas.