María, a mi siempre me ha gustado la frase : «Mas vale parecer tonto 5 minutos y preguntar que callarse y serlo toda la vida», aunque confieso que a mi me pasa en muchísimas ocasiones lo mismo que a tí, sobretodo hace unos años, cuando no me atrevía ni a hacer un gesto que pudiera llamar la atención al resto de la gente que me rodeaba.

Todo esto es producto de la ansiedad generada por la inseguridad y la falta de autoestima. Tienes miedo a hacer el ridículo porque te sientes inferior al resto de la gente, pero dejar de hablar en medio de una reunión cuando tengas cosas que decir es aumentar ese miedo y por consiguiente esa inseguridad que día a día irá aumentando.

Sé lo que es sentir ese miedo, sentir que todos los ojos se posan en ti, que el corazón se te acelera, que te ruborizas y tartamudeas, que te quedas bloqueado y en blanco y que no sabes expresar lo que sientes, yo había llegado a tomar unas pastillas que actúan sobre el sistema central periférico y que bloquean cualquier reacción de este tipo, incluso mi psiquiatra me las había recetado para casos puntuales cuando tenia que hablar en alguna reunión que me provocaba pánico.

Te recomiendo que empieces cuando puedas una terapia psicológica, la asertividad funciona muy bien y con el tiempo vas ganando la confianza que te falta y te sientes más fuerte ante situaciones que te provocan tensión y malestar. Es una terapia lenta pero progresiva y seguro que poco a poco irás ganando esa seguridad y fuerza que ahora no tienes.

Un abrazo y lucha por conseguir ese objetivo, ahora mismo tu bienestar depende de ello.