El diagnóstico diferencial sirve para hacer una valoración correcta de una enfermedad en cuanto a otros de semblantes, con las cuales se pudiera confundir o solaparse. Es una valoración clínica que corresponde exclusivamente a los especialistas, en ningún caso, a los pacientes. En muchos casos, requiere pruebas y exploraciones complementarias que se tienen que solicitar a los servicios médicos pertinentes en cada caso.
El trastorno de ansiedad por separación o alguno de los síntomas característicos pueden ser confundidos con otros trastornos o con ciertos comportamientos no patológicos.
Por eso, es importante hacer el diagnóstico diferencial con
- Rechazo escolar en la fobia escolar: se debe al miedo a hacer el ridículo ante los otros, o a condiciones aversives del medio, más que al miedo para separarse de las figuras próximas.
- Trastornos generalizados del desarrollo: también puede haber ansiedad por separación, pero, además, hay una alteración de las relaciones sociales, incluidas las familiares. Seria, por ejemplo, el caso del autismo.
- Esquizofrenia u otros trastornos psicóticos: acostumbran a iniciarse en una edad más tardía y tienen una serie de síntomas característicos (alucinaciones, delirios, allanamiento afectivo) que son la causa principal del malestar. A pesar de esto, en el trastorno de ansiedad por separación, pueden haber ciertas experiencias perceptivas inusuales que, aunque se basan en un estímulo real, solo suceden en situaciones determinadas y son reversibles, hecho que las diferencia de las alucinaciones.
- Trastorno de ansiedad generalizada: la ansiedad no se limita a las situaciones que implican separación de las figuras importantes. También hay ansiedad por el rendimiento académico o deportivo, para el cumplimiento de las obligaciones o por las consecuencias de los actos pasados.
- Trastorno de angustia con agorafobia o agorafobia sin historia de trastorno de angustia: se inician en una edad más tardía y el que se teme son las situaciones en que se pueden sufrir un ataque de pánico inesperado o alguno de los síntomas. Aunque en el trastorno de ansiedad por separación, la amenaza de la separación puede elevar la ansiedad hasta producirse un ataque de pánico.
- Hacer campana en el trastorno disocial: el absentismo escolar no se debe a la separación de los higos próximos, sino que es causado por el propósito de romper las normas. Además, el niño o la niña acostumbra a quedarse, durante este periodo, fuera de casa.
- Rechazo escolar en los trastornos del estado de ánimo: a causa de la pérdida de ganas, el cansancio o la preocupación para llorar en público. En el trastorno de ansiedad por separación es posible que aparezcan síntomas depresivos (tristeza, desgana, apatía) mientras están separados o a la anticipar la separación.
- Trastorno *negativista desafiando: en el trastorno de ansiedad por separación, puede haber una conducta oposicionista para conseguir que no se produzca la separación. En el trastorno *negativista desafiando, esta conducta de oposición no se limita a las situaciones en que se tiene que producir la separación respecto de las figuras próximas para el niño o a la niña.
- Niveles de ansiedad por separación propios de la etapa de desarrollo: hay bote a la separación, pero es normal para la edad en que se encuentra el niño, hecho por el cual este miedo no sería clínicamente significativa.