Hola, hace 5 años que desarrollé ataques de pánico y ansiedad por motivos emocionales de pareja sumado al COVID. Asistí con psicólogos, psiquiatras, neurólogos y sacerdotes. A pesar de la medicación y sedantes nada me ayudó. Así que después de un años decidí dejar las medicinas y enfrentar mis crisis. Leo y escucho mucho conferencias sobre como enfrentar y superar mis trastornos y aunque no han desaparecido aún vivo con ellos. Hace 3 años que no he conversado con nadie sobre cómo me siento. Reprimo el llanto y mis emociones, y ahora siento que ya no aguanto más. Nunca en mi vida había deseado morir como ahora. La impotencia de no hablarlo con nadie me carcome por dentro. Porque por mi situación de madre soltera no puedo abandonar a mis hijos y rehacer mi vida fuera de mi país. Me siento presa de mi situación y no poder hacer nada. No tengo amigos ni actividades que me ayuden a distraer por mi situación económica. No salgo a ninguna parte y me encierro en mi habitación con mis pensamientos negativos y catastróficos. Las manos me sudan y tiemblan. A veces siento fiebre y otras frío. Tengo fuertes espasmos musculares involuntarios parecido a convulsiones pero con más fuerza en mi estómago. A veces la contracción en tan fuerte que me deja sin respirar por unos segundos. Reprimo tanto el llanto que siento que si dejo que las lágrimas salgan explotaría y seguramente no pueda parar perdiendo el control. Desearía tanto una llamada y saber que alguien me escucha y es empático conmigo. Desearía mucho saber que tengo a alguien que sabe cómo me siento y lo que me pasa. Alguien a quien poder acudir cuando tenga una crisis que no pueda controlar.
Sueño tanto con el día en que pueda tomar el control de mi vida, cuidarme de nuevo y ser la persona alegre y con muchos amigos que alguna vez fui.
Deseo tanto rehacer mi vida. No sentirme presa de éste presente que me hace tanto daño. Sentirme libre y no presa de mi propia vida.

Gracias por leerme.
Bendiciones infinitas.