Trastorno Obsesivo Compulsivo: Diagnóstico Diferencial

El diagnóstico diferencial sirve para hacer una correcta valoración de una enfermedad con respecto a otras parecidas, con las que pudiera confundirse o solaparse. Es una valoración clínica que corresponde exclusivamente a los especialistas, en ningún caso a los pacientes. En muchos casos requiere de pruebas y exploraciones complementarias que han de solicitarse a los servicios médicos pertinentes en cada caso.

El Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC), ha de diferenciarse de otros trastornos formalmente parecidos:

  • Trastorno de ansiedad debido a enfermedad médica: si existen obsesiones y/o compulsiones, se explican por los efectos fisiológicos directos de una enfermedad médica.
  • Trastorno de ansiedad inducido por substancias: las obsesiones y compulsiones se explican por los efectos fisiológicos directos de una sustancia -drogas o medicamentos-
  • Trastorno dismórfico corporal: el contenido de obsesiones y rituales es, únicamente, la preocupación por la propia apariencia.
  • Fobias espécífica o social: inquietud por un objeto o situación temida y no por el contenido de las ideas obsesivas.
  • Tricotilomanía:  ideas o rituales recurrentes relacionados con arrancarse el cabello.
  • Episodio depresivo mayor: constantes cavilaciones sobre hechos desagradables, congruentes con el estado de ánimo negativo. No son ideas egodistónicas, es decir, la persona no las ve como algo ajeno a sí misma -a diferencia del trastorno obsesivo-compulsivo-.
  • Trastorno de ansiedad generalizada: hay preocupaciones excesivas, diferentes de las obsesiones en que las preocupaciones se viven como inquietud excesiva por hechos de la vida real -ej. por perder el empleo-, además que se experimentan como autogeneradas (egosintónicas).
  • Hipocondría: ideas recurrentes por el miedo a padecer o estar padeciendo una enfermedad, a partir de la mala interpretación de síntomas físicos. No suelen existir rituales como lavados o repeticiones excesivas.
  • Fobia especifica a la enfermedad: tampoco hay rituales, y la preocupación más que por padecer ya la enfermedad, es por la posibilidad de contraerla.
  • Trastorno delirante o trastorno psicótico no especificado: las obsesiones o compulsiones se desmarcan de la realidad -ej. creer que uno es responsable de la muerte de otra persona, porque una vez se la deseó-. Además, suele haber otros síntomas psicóticos.
  • Esquizofrenia: ideas delirantes recurrentes y comportamientos estereotipados extraños no congruentes con la realidad, y egosintónicos -sintonizan con la propia persona-. En ocasiones, se presentan ambos diagnósticos.
  • Trastorno de tics o trastorno de movimientos estereotipados: estereotipados: tanto tics -ej. aclaramiento de garganta, parpadeo repetitivo- como movimientos estereotipados ej. tambalearse, morderse a uno mismo- son menos complejos que las compulsiones y no tienen como objetivo eliminar una obsesión. Es posible que se den síntomas del trastorno obsesivo-compulsivo y del trastorno por tics a la vez, diagnosticándose ambos.
  • Comportamientos dirigidos asociados con otras enfermedades mentales: Juego patológico, Parafilias, Trastornos alimentarios, y Dependencia o Abuso de alcohol. Existen pensamientos recurrentes y comportamientos excesivos, referidos respectivamente a jugar, actividad sexual, la comida o el alcohol, que no pueden considerarse obsesiones porque la persona obtiene placer. Si los desea abandonar es por lo perjuicios que le acarrean.
  • Trastorno obsesivo compulsivo de la personalidad: no hay ni obsesiones ni compulsiones. Se caracteriza por una permanente preocupación por el orden, el control y el perfeccionismo. Si se cumplen los criterios se pueden hacer ambos diagnósticos.
  • Supersticiones no patológicas y comportamientos repetitivos: no consumen demasiado tiempo, ni afectan excesivamente a actividades cotidianas de la persona. Además no provocan una malestar significativo.

Para saber más

First,M; Frances, A.; Pincus H.A. (1999). DSM-IV: Manual de diagnóstico diferencial. Barcelona. Ed. Masson

First,M; Frances, A.; Pincus H.A. (2002). DSM-IV: Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales. Barcelona. Ed. Masson

Talbott,J.A.;Hales,R.E. y Yudofsky,S.C.(1989): Tratado de Psiquiatría. Barcelona: Áncora

Video ilustrativo: Trastorno obsesivo-compulsivo, qué y cómo se trata